¿Qué es lo que hizo humanos a los humanos?

Los investigadores aún hoy se preguntan sobre las verdaderas causas que explican el origen del hombre. Muchos afirman que si bien la capacidad de los homínidos para fabricar y manipular utensilios y armas ha tenido una importante influencia en la evolución, no fue el único factor determinante. El paso del mono hacia el hombre ocurrió entre los 4 y los 6 millones de años, y las herramientas más antiguas que se conocen tienen, como máximo, 2 millones de años de antigüedad. Tampoco es posible imaginar que una inteligencia extraordinaria permitiese la supervivencia de la especie de la que desciende el homo sapiens: el cerebro de los primeros homínidos se asemeja en estructura y en tamaño al de los monos más evolucionados. ¿Fue entonces el andar erecto el factor que explica la verdadera naturaleza del hombre? Ésta es una característica particular del ser humano. Sin embargo, los científicos afirman que, si bien ser bípedo ayudó en muchos aspectos a la supervivencia, los cuadrúpedos muchas veces son más ágiles y rápidos que el hombre. Ni el manejo de materiales, ni el tamaño del cerebro, ni ser bípedo, parecen conformar –aisladamente– los factores determinantes que hacen al hombre ser humano… Entonces, ¿cuáles fueron las causas que lo explican? La causa del éxito de la especie humana, según algunos investigadores, hay que buscarla en la totalidad del comportamiento. Liberarse de la necesidad de andar en cuatro patas, significó para los homínidos tener las manos libres para trabajar y para fabricar herramientas. Pero esto no habría sido suficiente sin el lenguaje. Porque el lenguaje tiene el valor de ser un instrumento de comunicación y, también, de conservación de la memoria colectiva; permite, además, razonar para construir e innovar. Los homínidos, a partir de determinado momento, fueron capaces de compartir e intercambiar aprendizajes que les permitían enfrentarse mejor con la naturaleza de la que dependían sus vidas. Algunos autores afirman que el homínido se hace hombre cuando, partiendo de lo que existe (hojas, piedras, huesos…), imagina, piensa lo que no existe (cuerdas, cuchillos, punzones…) y se lanza a realizarlo. Por esto, el hombre es un ser racional: además de sentir, razona (piensa). Pero el ser racional del hombre sólo fue posible gracias a su ser social: viviendo juntos, necesitándose y ayudándose unos a otros, los hombres tomaron conciencia de que el ser humano es más humano cuando está con otros. Cuando los hombres establecieron relaciones sociales y crearon una cultura, organizaron una sociedad.

Alonso, María E.; Elisalde, Roberto y Vázquez, Enrique C. “La Antigüedad y la sociedad feudal”. Buenos Aires. Aique, 1994.