Pío Collivadino nació en la Argentina en 1869. Fue un exponente importante del campo cultural de nuestro país, no solo por su producción plástica sino también por su colaboración con la Academia y las instituciones artísticas argentinas. En 1907 compartió la fundación del grupo Nexus, y en 1908 fue nombrado director de la Escuela Nacional de Bellas Artes.

Su obra La hora del almuerzo, de 1903, y a diferencia de otras obras de carácter realista, tiene un particular trabajo de la luz. La misma parece descomponerse y abrir un espacio en vez de cerrarlo en favor de la línea. El sol del mediodía ayuda a dar cuenta de este recurso formal. Nada de lo trágico o dramático aparece en esta obra; por el contrario: son hombres que gozan de un trabajo digno y toman la hora del almuerzo para distenderse de sus ocupaciones. ¿Dónde están trabajando? ¿Cuál será su oficio? Se alimentan ávidamente, dispuestos a retomar sus tareas después de este intervalo.

La mayoría de los hombres son jóvenes y fuertes, y constituyen el empuje mayor de un país en desarrollo; nada del achaque ni de la debilidad se ve en sus cuerpos. Los primeros años del siglo XX auguraban una Argentina promisoria.