Presentamos aquí algunos fragmentos -6 minutos en total- del documental La escuela de la señorita Olga, sobre una de las experiencias pedagógicas más interesantes de nuestro país, en la que la docencia y el arte fueron inseparables. Una experiencia educativa conducida por la maestra Olga Cossettini entre 1935 y 1950, en una escuela primaria del barrio Alberdi, de Rosario.

Para ver el video seleccione alguna de las siguientes tecnologías de visualización. (Se abrirá una ventana nueva)

Windows Media Player

Versión para módem - WMVersión para módem
(conexión lenta)

Versión para ADSL - WMVersión para ADSL
(conexión rápida)


Descargar video - WMDescargar video

QuickTime Player

Versión para módem - QTVersión para módem
(conexión lenta)

Versión para ADSL - QTVersión para ADSL
(conexión rápida)


Descargar video -QT Descargar video


Ficha técnica del documental

La escuela de la señorita Olga
(Mediometraje en 16 mm, de 1991)

Dirección: Mario Piazza
Fotografía: Tristán Bauer
Cámara: Tristán Bauer
Montaje: Laura Bua y Mario Piazza
Sonido directo: Eduardo Safigueroa
Duración
: 48 minutos

El documental presenta el testimonio de varios de sus alumnos -hoy adultos-, y el de su hermana y colaboradora, la maestra Leticia Cossettini.

Olga Cossettini (1898-1987) fue una maestra santafesina vinculada a las posiciones más democráticas de la "escuela nueva". T ransformó la escuela Gabriel Carrasco de Rosario en un lugar de libertad y formación artística único en su tiempo. Miles de alumnos pasaron por sus aulas, y lo especial es que ninguno se olvida - 55 años después - de la señorita Olga.

Era una escuela pública de un barrio obrero. Sin maestros especializados y con escasos recursos consiguieron, en forma paulatina, ir cambiando el rígido sistema educativo de la época. En la escuela Carrasco no había "hora" de Dibujo, Artes Plásticas o Expresión Corporal: la educación estética era parte nodal de la formación de los niños. Las asignaturas perdían sus contornos y tanto la Biología como la Geografía podían invitar a recurrir al pincel o a la poesía.

En la base de esta manera de concebir el currículum estaba la convicción de que la escuela debía ensanchar la capacidad del niño de imaginar, de crear, de expresarse y de elegir en qué lenguaje hacerlo.

El Coro de Niños Pájaros, el Teatro de Niños y el de Títeres, la danza, los conciertos fonoeléctricos, el modelado, el laboratorio de ciencias, las excursiones por el barrio, una revista escolar , la cooperativa de alumnos , las misiones culturales, la biblioteca escolar y pública, el consultorio odontológico, el control oftalmológico, el club de madres y la asociación de padres se integraron con armonía al quehacer cotidiano.